Anyuri es prueba viviente de que después de la tormenta, siempre viene la calma. ¿No me cree? Para que tenga un norte, ella inició el 2018 con el pie izquierdo por bailar en la tarima con un menor de edad a finales de 2017. Hoy, a menos de dos meses para recibir el 2019, está en boca de todos. Es la reguesera del momento, con más de 400 mil seguidores en Instagram, y de paso está más "reeecaa" que nunca. ¡Jamás 'inrica'!
Ya sea para bien o para mal este ha sido el año de "La Cuchita"; su fama nació de la noche a la mañana para algunos, pero lo cierto es que viene tirando puñete en la música desde los 14 años.
Era corista en la iglesia
Antes de que naciera "La Cuchita", Yasirey Anyuri Lozano Gonzáles cantaba en el coro de una iglesia 2014, pero su rebeldía por darle palo a los hombres en sus canciones y querer exponer su talento la llevó a relacionarse con productores y abrirse paso en la industria.
Pero su camino, sin escala, al éxito empezó tras conocer a Dubosky, a quien considera su padrino musical. "Venía tratando de que conocieran mi talento hasta que conocí a productores ya de la farándula como AT Fat, El Código Kirkao; incluso grabé canciones con ellos pero no se pegaron; dos que tres sí me conocían, pero en sí la cereza del pastel fue cuando conocí a Dubosky. Empezamos a parquear, él creó 'La máxima bandera', yo era una de las chicas hasta que me dijo: tú tienes las ganas y el talento". De allí, él la hizo montarse en el ritmo de Rihanna wa, wa, wa y sacó su primer sencillo "Na na na". Cuando graba esta canción con el sello Panama Music, nace "La Cuchita", bautizada por el mismo Dubosky.
Del caos al estrellato
Acabándose el 2017 todo iba bien, hasta que bailó con el menor en una tarima y el video se hizo viral en redes sociales. Tanto fue el alboroto que La Sección de Atención Primaria de la Fiscalía Metropolitana abrió una investigación por el supuesto delito contra la Libertad e Integridad Sexual tras una denuncia presentada por la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia Senniaf. No bastó con el lío legal para muchos, pues le dieron palo parejo por las redes. La tildaron de todo. El 3 de enero se pronunció en sus redes, ofreció disculpas y pidió nuevas oportunidades. De hecho aseguró que había aprendido la lección. ¿Recuerdan?
"Cerrando el año me pasa el problema del niño y todo se volvió un caos. Sí, Panamá entero me conoció, todo mundo sabe quien soy yo por el problema del menor de edad. Obviamente eso me afectó porque yo viéndome en las noticias cómo se expresaban de mí, diciendo que yo era una acosadora... a mí afectó bastante. Pero después me fui dando cuenta de que el que no me conocía me empezó a conocer".
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Sus manejadores y ella misma se agarraron de esto y le dieron la vuelta a la tortilla. Es más, sacaron una canción sobre este revulú, pero decidieron no lanzarla porque ya la marea había bajado.
Polvo a Media
Su segunda canción fue esta. Ya en este punto, sus plenas se bailaban y se cantaban en las discotecas, siempre con la controversia latente del contenido de sus letras, pero eso es lo que le gusta. Así nació #ladelpelorizo que ahora está más producida, estilizada y con mejor "cuerpa". Su paso por el bisturí en Colombia fue el toque que le faltaba para convertirse en lo que es hoy, toda una celebridad nacional. ¡Ah! Y el 2019 que se prepare, porque viene con otro cambio y con sus rizos de vuelta.